La Universidad Nacional de Hurlingham (UNAHUR) debió apelar a la creatividad para sostener las líneas de trabajo de bienestar estudiantil. El objetivo, como afirma Walter Wallach, rector en ejercicio de la UNAHUR, es siempre uno: “mejorar las trayectorias estudiantiles“.
La Secretaría de Bienestar Estudiantil se ocupa de gran parte de las becas de ayuda económica y de algunos otros programas que, mediante diversas estrategias, buscan fortalecer las trayectorias estudiantiles. Además, tiene a su cargo pasantías internas (realizadas en la propia universidad) y externas. “Están normadas por la Ley de Pasantías y son una instancia netamente formativa”, subraya Violeta Kesselman, secretaria de Bienestar Estudiantil.
“Durante la pandemia, debimos adaptar todo nuestro trabajo”, afirma Francisco Benito, director de la Secretaría de Bienestar Estudiantil y docente del Profesorado Universitario en Educación Física de la UNAHUR desde 2016. Y agrega: “Antes, por ejemplo, las y los estudiantes que tenían becas de apuntes retiraban los materiales directamente de la fotocopiadora. Hubo que pensar toda una ingeniería para que cada estudiante recibiera los apuntes en sus casas, incluso en otros municipios, como Morón, Moreno, Ituzaingó, San Miguel, José C. Paz, La Matanza e, incluso, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Fue una salida creativa que surgió sobre la marcha”. Esa ingeniería implicó diseñar formas virtuales de inscripción a las becas y un arduo trabajo junto con la Secretaría Académica para determinar en qué materia estaba inscripto cada estudiante. Luego de imprimir y rotular cada apunte, se consiguió el transporte y se organizó la entrega de los materiales a cada uno de los domicilios.
Wallach destaca: “En la pandemia, el apunte es más valioso que nunca y, a la vez, nunca había estado más distante, porque las y los estudiantes no podían acercarse a retirarlo. Entonces, la universidad presenta la propuesta inédita de llevar todo el material de estudio a cada una de las casas”. Si bien la beca de apuntes es la que tiene mayor cobertura y alcanza a unos dos mil estudiantes, resulta de gran importancia la beca que garantiza la provisión de materiales necesarios para la cursada de alguna carreras: estetoscopios, ambos, calculadoras, kits de ingeniería industrial, entre otros. Esta última alcanza a unos mil estudiantes.
También se sostuvo el Programa Bici UNAHUR, que otorga bicicletas en comodato hasta la finalización de la carrera. “A comienzos de 2020 –recuerda Kesselman–, como se interrumpió la cursada presencial (y en gran parte continúa interrumpida), reorientamos las entregas a estudiantes que son trabajadores esenciales (sobre todo de la salud) y también incluimos a quienes hacían el voluntariado en el Hospital Posadas en el segundo cuatrimestre del año pasado. Ahora, estamos muy cerca de una tercera entrega para quienes cumplen tareas en vacunatorios y pasantías en el armado de medidores de dióxido de carbono”. Y agrega Wallach: “La bicicletas eran para que las y los estudiantes pudieran ir a la universidad, pero las transformamos en un vehículo destinado a quienes prestan ayuda en el combate contra la pandemia. Las seguimos repartiendo en la misma cantidad”.
Las pasantías internas y externas son otro pilar de la tarea de la Secretaría de Bienestar Estudiantil. La primeras permiten que las y los estudiantes cumplan funciones en distintas áreas de la universidad, como la Secretaría Académica, la Secretaría de Extensión o el área de Sistemas. En el marco de la pandemia, se destaca el Programa Aire Nuevo: alrededor de veinte pasantes cumplen funciones en la elaboración de medidores de dióxido de carbono.
“Lo que pasa en esta Secretaría es el resultado del trabajo conjunto de todas las áreas de la universidad. A nosotros nos toca esta tarea y nos guiamos con el objetivo de que cada estudiante transite sus estudios de la mejor manera posible y se gradúe”, afirma Francisco Benito.
@AAUNAHUR
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